martes, 29 de enero de 2013

Un policía en Sevilla

Allá por octubre pude asistir al Festival de Series y una de las cosas que más recomendaron fue asistir al preeestreno de una nueva serie de Canal +, de la que yo desconocía su existencia. Sin embargo, saber que la cadena estaba detrás y tras el éxito de Crematorio y ¿Qué fue de Jorge Sanz? me animé enseguida a verla. Pero una serie de problemas técnicos impidieron el visionado del primer capítulo. Aunque algunas semanas después hicieron un preestreno, el no poderme desplazar hasta Madrid hizo que me quedase con las ganas (lo cual hace plantearme si no se podrían hacer mini-preestrenos en otras ciudades aprovechando toda la tecnología que está en nuestras manos, pero de eso ya hablaremos otro día). Así durante el mes de diciembre fueron emitiendo sus cuatro capítulos y gracias a mi tío, me los grabó y los pude ver este pasado fin de semana en maratón.

La series es una coproducción original de Canal +, Atlantic HD y ZDF, que narra la historia de Javier Falcon, un inspector interpretado por Marton Csokas, asentado en Sevilla donde tendrá que resolver dos casos de asesinato, uno con ingredientes muy personales y que esconden más de lo que en apariencia muestran. Dichas historias están basadas en las novelas de Robert Wilson, El ciego de Sevilla y Condenados al silencio.

Lo primero a destacar de la serie es su buena manufactura, su calidad. La serie está bien hecha, logrando atraparte en esa Sevilla algo oscura y fría y que hasta la Semana Santa no desentona para nada. Su ambientación está muy bien lograda y la fotografía es buena. Se aprecian que han cuidado todos los detalles, especialmente los más relacionados con lugares españoles tales como la comisaría, el despacho o la morgue. Técnicamente es una gran serie. Por otro lado, los actores realizan una buena interpretación. Cierto es que la serie está rodada en inglés y que verla doblada hace que tenga algunos matices negativos, pero todos ellos salvables si no eres un puritano de los idiomas. A mí no me resultó en ningún momento desagradable o incomodo. En tercer lugar, las historias, en líneas generales, se antojan interesantes en papel, aunque su puesta en escena, hace que no sea todo tan bonito como pinta en apariencia.

Sin embargo y a pesar de todas las alabanzas, parece que le falta algo y creo que en gran parte, la culpa la tiene la escasez de capítulos. Como decía, las tramas en líneas generales están bien, pero tener que desarrollar cada caso en dos capítulos de 45 minutos hace que en muchos casos se pierda información. Ello es especialmente significativo en el primero al estar más conectado con el protagonista y al ser un caso más enrevesado en el que no estaría de más saber algo más de su pasado. La consecuencia de ellos es que el desarrollo de los casos sea algo atropellado. Quizás con un capítulo más para cada uno hubiese sido suficiente para lograr completar las historias y que éstas estuviesen más cerradas. Pero que me esté quejando de ello no significa que no se entiendan bien o que te pierdas, al contrario, todo es entendible, pero si hay algunas incógnitas que hubiese estado bien resolver.

Al final resulta que no es un gran procedimental que pintaba al principio, pero sí un buen producto español (sí, estrictamente es una coproducción, lo sé) en el que se deberían fijar muchas series españolas del género para aprender sus puntos fuertes y resolver los negativos. Es una serie que yo recomendaría a todos ellos que se quejan de esas de que sólo se hacen series casposas. Sin ser como digo la mejor de las series, resulta entretenida que es al fin y al cabo lo que se le pide a las series. Hasta ahora Canal + ha tenido una brillante trayectoria en la que a la cabeza estaría sin duda Crematorio. Esperemos que la cadena lo siga intentando porque es una buena muestra de que se pueden hacer otro tipo de series en España, diferentes, y quizás más apegadas al gusto de series internacional.




martes, 22 de enero de 2013

Los sentimientos a flor de piel

(OjO SPOILERS LA QUINTA TEMPORADA DE FRINGE)


Fringe ha sido la serie que más he disfrutado en los últimos años. Comenzó con ese primer año tan autoconclusivo y frío y con poco que destacar más allá del puro entretenimiento y alguna base importante como que Olivia había sido objeto de experimentos y con un incongruente John Scott del que afortunadamente todos nos olvidamos. No obstante, fue ya en la segunda temporada cuando se empezó a construir el verdadero universo de Fringe, dándonos una segunda parte y posteriormente un primer tramo de la tercera temporada magistrales, con los saltos de universo y los personajes-nate. Sin duda, de mis partes favoritas de la serie. Pero la espada de Damocles de la cancelación siempre ha estado sobrevolando sobre la cabeza de Fringe, de ahí que esa cuarta temporada tuviese apuntes de convertirse de ser el final y efectivamente, en cierta forma así fue, dando carpetazo a la historia de los dos universos que habíamos conocido en las anteriores temporadas. Sin embargo, llegó un regalo extra en forma de 13 últimos capítulos, un bonus track. Siendo que la trama importante estaba concluida, había que sacar de la chistera algo nuevo e interesante. Y sin duda acertaron con la trama de la quinta temporada.

La quinta supone un reseteo en cierta forma, pero manteniendo la idea básica de la serie. Aunque los primeros capítulos fueron algo desconcertantes ya que nadie sabia de que iba la cosa hasta que se llegó al punto culminante de la muerte de Etta, que supuso todo una revolución. No obstante, después de eso noté cierto salto en los últimos capítulos, como si se necesitasen algunos capítulos más en cuanto a esa parte final con el pequeño September y el resto de observadores. Sin embargo, como nunca ha sido mi motivación por ver la serie para elaborar teorías y crear quebraderos de cabeza, no me ha molestado demasiado. No me importa que haya incongruencias o agujeros, algo por otro lado imposible de controlar con viajes y paradojas temporales. Lo cierto es que al final lo que importaba era saber si iban a vencer a los observadores y poder volver a estar con Etta. Ahí, el protagonista ha sido Walter con su sacrificio final y es que nadie podía imaginar un final feliz, no hubiese sido justo. Walter siempre ha llevado en su mochila la culpabilidad y la mejor ocasión para expiarla era precisamente esa, devolver a Peter la posibilidad de tener una familia, de poder volver a tener a Etta en sus brazos. De ahí, esa increíble escena con el video en el que le explica a Peter sus planes, una escena que me ha conmovido hasta tal punto de derramar unas lágrimas.

Todas las series de ciencia ficción se caracterizan principalmente por revestir en un escenario futurista, científica y demás los sentimientos más naturales de toda la vida. Por mucho que veamos cosas increíbles o naves espaciales, los sentimientos humanos siguen siendo los mismos, son el único motor de la vida, y Fringe no ha escapado de ello. Si se ha caracterizado por algo a lo largo de sus cinco temporadas es que todo tenía relación con los sentimientos y la familia desde los casos autoconclusivos hasta la trama de fondo, pero además es que a los telespectadores les ha movido en sus sentimientos desde la alegría en su visionado hasta el enfado cuando no aportaba lo que uno quería. Han sido esos sentimientos los que han movido todas las tramas tanto en la serie "normal" con la pérdida de Peter por parte de Walter hasta en el "bonus track" de esta quinta temporada con la pérdida de Etta por parte de todos. Analizando estos últimos trece capítulos no han sido tan diferentes a lo visto en las cuatro temporadas anteriores. Bueno, lo más acertado es decir las tres anteriores, ya que la primera para mí es algo totalmente diferente.  En ambas el motor de las grandes tramas ha sido la pérdida de un hijo, más allá de Massive Dynamics y sus experimentos o los observadores. Ese sensación de que sobrevivir a un hijo es la idea subyacente en las dos Fringe y además, la reacción en ambas tampoco dista mucho de sí. Si en la primera Fringe vimos como Walter se enfrentaba a la muerte de Peter secuestrando al Peter del otro lado y luchando para que Walternate no se lo quitase (evitando así una guerra entre ambos mundos); en la Fringe "bonus track" es la reacción de Peter lo que interesa, si bien la intentan esconder un poco con el objetivo final de hacer desaparecer a los observadores. Peter no le importa jugarse su vida con total de poder volver a recuperar a Etta.

En conclusión, Fringe se ha descubierto como todo un drama familiar revestido de toques de ciencia ficción. Los personajes, sus emociones, sus motivos para hacer según que cosas, especialmente las controvertidas, y las reacciones han tenido un punto en común: la familia. Lo importante en la serie ha sido siempre las relaciones familiares, cómo interactuaban todos ellos, con sus decepciones y sus reconciliaciones. Pero sobre todo, cómo se reacciona ante la muerte de un hijo y qué seríamos capaces de hacer para recuperarlo. Esta esencia se ha mantenido inalterable a lo largo de sus cinco temporadas y por eso yo me siento tan feliz con ella, más allá de que haya preguntas sin contestar o incongruencias. Y por eso la echaré tanto de menos.


Imágenes de Zona Fringe




jueves, 17 de enero de 2013

Las familias de intercambio

(Sobre Switched at birth y The Lying game - SIN SPOILERS)

Cuando uno se adentra a las series norteamericanas, lo primero que tiene que aprender es que su emisión es todo un mundo. Lo normal son los parones en Navidades, pero también puede suceder que haya series que tenga una emisión intermitente e, incluso, otras que pensadas principalmente para verano, han visto como su éxito las ha lanzado a la gran liga de invierno, bien con su segunda parte de temporada o bien con una nueva. Este año son cuatro las que viven esto: Switched at Birth, The Lying Game, Suits y Bunheads. Aprovechando precisamente esta circunstancia y que ya han vuelto y han emitido dos capítulos, voy a hablaros de las dos primeras en este post, porque creo que se les da poca importancia y son dos de las series que más disfruto actualmente.

De Switched at birth, hablé de su piloto, pero no la había vuelto a mencionar y he de confesar que aunque sigue habiendo tópicos por ahí pululando, sigue siendo un drama muy convincente. Han sabido buscar su propia idiosincrasia a través de la sordera de los protagonistas, saben muy bien introducir tramas en las que la sordera está presente como las dificultades de Daphne trabajando en una cocina o las bromas que se hacen entre las personas sordas en relación a los oyentes cuando no les entienden, pero sin ser especialmente sensibleras ni nada por el estilo. Han sabido construir una gran familia; en su conjunto es muy adorable y entrañable y es difícil no cogerles cariño. Todos con sus imperfecciones se complementan.. Quizás el único que me molesta un poco su presencia es Angelo, el padre biológico de Bay, principalmente porque sus tramas han sido bastante aburridas y la de esta segunda temporada veremos si consigue reconciliarme con él. El resto y principalmente los jóvenes que son los que llevan el peso de las tramas, me caen muy bien. Todo ello lo han ido logrando poco a poco con una primera temporada muy larga para lo que estamos acostumbrados (llegaron a los 30 capítulos) y con una segunda que apunta a ir por el mismo camino, así que por mí podían haber seguido con la enumeración y haber tenido una temporada extremadamente larga. En definitiva, un drama adolescente muy sólido con personajes muy carismáticos y encantadores.
La segunda, The Lying Game, sé que es más difícil de vender, porque entra en un género que despierta muchos prejuicios, pero el nivel de entretenimiento es máximo. De ella, hablé para evaluar su primera temporada con spoilers. A diferencia de otras series de su género, la gran baza de esta serie es que han sabido engordar el misterio base de la serie, sin perder la identidad del mismo y logrando a través de las pequeñas pistas que dan no perder el rumbo. Por tanto, han jugado muy bien con los elementos para no resultar repetitivos (e, incluso, sacados de la manga en muchos casos) a diferencia por ejemplo de Pretty Little Liars (que por cierto aún dudo de si escribir de su vuelta ya que no me ha aportado nada). Vale que una sólo lleva una temporada y la otra cuatro, pero en aquello que se puede comparar las zorrupias salen perdiendo porque el misterio de saber quién es A con sus pistas y demás ya no tiene ningún atractivo y nadie se lo cree ya. Veremos si The Lying Game consigue mantenerlo, eso también es cierto, pero de momento estos dos capítulos siguen muy bien engordando el misterio, pero sin perder el rumbo. Por lo demás, tiene todos los elementos de este tipo de series. Gente guapa, líos amorosos, rencillas, celos y demás. 

De momento, la vuelta de ambas series me han convencido mucho y son dos series que consiguen que los 40 minutos se me pasen volando. Son, dentro de sus géneros, muy divertidas y amenas que es justo lo que les pido a este tipo de series.


miércoles, 16 de enero de 2013

El diario de los 80

(Sobre The Carrie Diaries - SIN SPOILERS)


Año nuevo, serie nueva. El primer estreno de este año, The Carrie Diaries, tenía una durísima misión: romper todos los prejuicios de su origen y de su trailer. Lo primero era complicado, porque la serie proviene de una anterior, basada a su vez en unos libros. Efectivamente, la serie narra la adolescencia de Carrie, la protagonista de Sexo en Nueva York y los muchos fans temían que fuese un balonazo en la cara a la serie madre. Yo sin ser fan acerrima de Carrie adulta, sí vi la serie así que la curiosidad estaba presente. Por otro lado, quizás el trailer apuntaba a una mamarrachada de cuidado. Todo lo contrario. Su piloto ha sido muy bueno y ha convencido.

Como bien decía, The Carrie Diaries se traslada a Conneticut en 1984, donde Carrie con 16 años vive con su amable padre y su rebelde hermana, dos años menor. Los primeros minutos nos dan una noticia desconocida: recientemente había perdido a su madre por culpa del cáncer, o al menos yo no recuerdo referencia alguna. Para sobrellevar mejor la noticia y ya de paso, averiguar quién es y qué es lo que quiere hacer, su padre le consigue una beca en Nueva York. 

El piloto supone un buen comienzo en cuanto a la presentación de esa Carrie adolescente, con dudas, con pajaritos en la cabeza, como cualquier adolescente. Sin duda, Anna Sophia Robb ha presentado un personaje totalmente adorable y entrañable, lo cual es todo un plus en una serie de este tipo. Poco se parece a la Carrie adulta que vimos en Sexo en Nueva York, pero ninguno nos parecemos a nuestros yo en la edad de pavo, así que no hay que buscar ese tipo de comparaciones. No obstante, sí tenemos ciertos guiños a la serie como cuando ella escribe en sus libretas en la ventana o cuando no le cabe toda la ropa en el armario.

También hay muchas referencias a los 80, década en la que se plantea la serie; tanto en la ropa (¡ay, esos colores chillones!), en la decoración (¡ay, esos teléfonos!), en la música (¡ay, material girl) o en los amoríos adolescentes (¡ay, Rob Lowe!). Lo que plantea una cuestión muy interesante: ¿a quién está dirigida esta serie? Siendo de CW, uno piensa en los actuales adolescentes, pero dudo mucho ellos sean el público más potencial, o al menos el prioritario, puesto que no sé si entenderán las múltiples referencias y si cabrá en sus mentes algo tan básico como que las chicas no se llamaban constantemente por el teléfono. Por el contrario, quizás en el tema de las tramas veremos cierta modernización como en el tema del sexo y ahí sí que enganche a los nuevos jovenzuelos. Los jóvenes más mayores (sí, los de la treintena también son jóvenes) sean los que más disfruten con esas referencias, pero para que se enganchen a la serie está claro que les tiene que gustar este tipo. Por lo pronto, su audiencia ha sido algo baja, aunque me gustaría saber en qué target ha tenido más aceptación.

Pero volviendo a lo importante, el primer capítulo ha sido muy entretenido y divertido. Sus 42 minutos pasan muy rápido y presentan muy bien a la protagonista, una niña muy adorable y encantadora; algo menos sabemos del resto de personajes, ya que sólo hay algunas pildoritas: las dos amigas, el novio de una de ellas (todos pensamos lo mismo sobre él, ¿no? veremos como lo desarrollan), el padre, la hermana, la queen del instituto, el primer amor... Es una perfecta sustituta para otra serie que tuvimos no hace mucho, pero de vida muy corta: Jane by desing, tanto en el estilo de serie como en que la moda va a estar muy presente. Una serie con todos los toques teen que tanto me gustan aderezado con la música de los 80, lo cual hace que tenga además una BSO muy interesante. Ganas de ver más capítulos y si continúan con este nivel tan bueno.




martes, 1 de enero de 2013

Própositos para 2013


Prácticamente podía copiar la entrada de hace un año, porque no he conseguido tachar casi ninguno de los propositos del año pasado, pero como todos sabéis el año pasado fue muy complicado y casi es mejor olvidarlo, pero una tradición es una tradición y para que engañarnos, también sirve para obligarme a escribir más y tener la cabeza ordenada respecto a las series que quiero ver.

1. Los que arrastro desde 2010:
  • Finalizar Urgencias (última temporada) e incluso añadiría ahora que revisionarla.
  • Revisionar Expediente X y hacer un especial en el blog.

2. Los que arrastro desde 2011. 

  • Finalizar las temporadas pendientes de las siguientes series: 
    • Six Feet Under (a partir de la 3 temporada)
    • Weeds (a partir de la 3 temporada)
    • Carnivale (2 temporada) 
  • De la lista negra, ver las siguientes series:
    • Firefly (1 temporada)
    • Kings (1 temporada)
    • Pushing Daisies (2 temporadas)
    • Roma (2 temporadas) 
    • In Treatment (3 temporadas) 
    • It's Always Sunny in Philadelphia (6 temporadas) 
    • Dexter (6 temporadas)
    • The Shield (7 temporadas)
    • The West Wing (7 temporadas)

3. Los que se mantienen todos los años: 

  • Continuar con el blog y actualizarlo una periocidad de al menos una vez a la semana (sí, poco es, pero igual que mi tiempo) y viendo lo que me pasó el año pasado no puedo obligarme a más).
  • Llevar las series a ritmo de emisión.


4. Nuevos propósitos para el 2013: Como tengo poco tiempo, tendré que organizarme muy bien el visionado de series así que ello implicará además:
  • Ver más series británicas y doramas, que siempre es beneficioso ampliar fronteras y ver series distintas, así que estoy abierta a vuestras sugerencias.
  • Terminar de ver Damages que me falta su última temporada.
  • Seguir viendo Doctor Who.
  • Leer algún libro relacionado con la televisión para instruirme más sobre el mundillo.
Y tampoco quiero poner muchos más propósitos que viendo que cada año cumplo muy poquitos, hay que ser sincera con una misma y ser consciente del tiempo y de las ganas.