domingo, 30 de enero de 2011

The Damon's Descent

(OjO. Spoilers del capítulo 2x12 de The Vampire Diaries)

La vuelta de The Vampire Diaries tras las vacaciones se ha titulado The Descent (el descenso) y no sé si por casualidad o no, a mí me ha parecido que ha descendido en algo. A priori, el título de este episodio tiene varias interpretaciones: el descenso de Rose hacia la locura tras ser mordida por un hombre lobo, el descenso de Tyler hacia el mundo sobrenatural que le rodea, el descenso en la relación entre Matt y Caroline; pero sin duda, este capítulo ha destacado el descenso de Damon hacia un montaña rusa de sentimientos.


Y esto último, ha sido lo que más me ha gustado. Ha sido la consagración de Damon como el personaje más interesante de la serie, por si alguien tenía alguna duda (yo no). Damon ha descenido hasta los infiernos de la ira, del enfado, de la tristeza... Damon nunca deseo ser vampiro, pero una vez convertido, aprendió a vivir con esa condición. Sin embargo, aunque sea un vampiro, sigue siendo un humano que padece y sufre por amor. Amor primero hacia Rose. Cierto es que en otro capítulo hubiese muerto en los primeros cinco minutos del episodio, pero aquí han querido mostrar cómo se produce la muerte de un vampiro, hecho que me ha parecido muy interesante, aunque quizás se podían haber ahorrado alguna persecución hacia Elena. Pero lo importante de la muerte de Rose es que hemos visto otra cara de Damon. Genial escena cuando Damon mata a Rose para que ella no sufra más, no sin antes asegurarse por medio de un sueño que ella podía irse en paz. Damon sufre por la pérdida de su amiga, se siente culpable, se frusta y se siente impotente. En esa vorágine de sentimientos, mucho influye, en segundo lugar, su amor hacia Elena. Aunque ella intenta ayudarle porque es su amiga, él no quiere, rehusa esa posibilidad. En su mirada, apreciamos el dolor y la lucha interna de Damon. Cegado por todos esos sentimientos, Damon sale a la captura de una víctima, reconociendo que él no es humano y por tanto, al ser vampiro tiene que matar. No creo que estemos ante el viejo Damon que hacía las cosas por capricho, sino ante una magnífica evolución del personaje. Siente, padece y actúa en consecuencia y en esta ocasión, es el dolor y la ira lo que mueven a Damon a actuar como un vampiro sangriento.


Por otro lado, tenemos la apertura de otra trama, que aunque me gusta, me parece que están gastando demasiadas balas en esta segunda temporada (claro, yo que pienso que va a durar unas cuantas más). Me explico. En esta segunda temporada, tenemos la encerrona de Katherine, la llegada de un malo maloso como es Klaus (que, por cierto, aún siguen en la búsqueda del actor... Actualización: Ha sido escogido para este papel Joseph Morgan), la historia de la piedra lunar y ahora la batalla entre hombres lobo y vampiros. En el caso de que haya una tercera, ¿qué trama larga van a tener? Pero, bueno, no adelantemos acontecimientos y centremos en este episodio. La llegada de Jules a Mystic Falls tras haber atacado a Damon y Rose va a traer muchos problemas. De momento, ya se ha enfrentado a Damon y está intentando reclutar a Tyler para su causa haciéndole dudar sobre Caroline.


Porque algo que estabamos esperando desde hace bastantes capítulos se ha traducido en éste: el triángulo amoroso entre Matt, Caroline y Tyler. Jules le hace ver a Tyler que hay más vampiros así que Caroline le ha mentido. Habrá que ver cómo repercute esto en la relación, ya que el hombre lobo confiaba mucho en la vampira (aunque todos sabemos que Caroline lo hizo para protegerlo -¿sabrá verlo él así también? -. Aunque Matt no se huela nada, el triángulo amoroso es muy convincente. Caroline sabe perfectamente los peligros de un mordisco de un hombre lobo, pero aún así es díficil controlar los sentimientos. Ambos le dan un beso en este capítulo así que es normal que tenga dudas.

Y finalmente tenemos al sosainas por antonomasia. Sí, Stefan. Está tratando de obtener más información sobre Klaus, por lo que decide encontrar a Isobel, así que se pone en contacto con el tío - padre John para sorpresa de Elena. ¿Qué información tendrá?

Aunque, en algún momento se me ha hecho algo pesado el capítulo, lo cierto es que ha tenido mucha enjundia, ya que supone el inicio de tramas bastante interesantes así que habrá que ver cómo en los próximos capítulos van tomando forma. Por cierto, ni rastro de Jeremy (¡bien!), ni de Bonnie (¡otra vez!), ni de Luka, su padre y Elijah (why?!).


jueves, 27 de enero de 2011

Todos los adolescentes mienten

Si hace poco teníamos el regreso de las zorrupias, ahora han vuelto otras  dos de las series teen de esta temporada  y parece que todas se han puesto de acuerdo en una cosa: las mentiras. Si en la serie de las zorrupias, está claro que es el leit motiv, las otras dos series han decidido que las mentiras también sean las protagonistas. Pero sin más pasemos a ver qué ha ocurrido en la vuelta (he dividido la opinión de las series en dos aparatados diferentes para que podáis elegir cuál leer).

HELLCATS
(OjO. Spoilers hasta el 1x12)

El piloto me pareció regulero; sin embargo, seguí viendo y ya para el final de la primera parte empecé a notar una ligera mejoría, aunque para ello tuviesen que acudir a lo más obvio, es decir, la traición de Marty y Dan hacia Savannah.

Dicha traición sigue coleando en la vuelta de vacaciones. Las animadoras se van de viaje a un campeonato para intentar llegar hasta los regionales y todo el mundo le hace el vacío a Marty, especialmente Savannah y Lewis. A la llegada al campeonato, todo se centra en quién va a ser la voladora, ya que el padre de Alice y su prometida están en la misma ciduad para ir a ver al hermano que juega al fútbol americano. Alice, en un atisbo de bitch, quiere aprovecharse del enfado de Marty y Savannah así que pide ser ella la voladora para que así su padre la vea. Finalmente lo consigue, pero la entrenadora descubre todo y, aunque en un principio Marty se resigna, consigue convencerla para que luche. Marty propone un concurso para ver cuál de las dos será la voladora. Quién mejor lo hace será Marty. Pero el puesto no es seguro aún. Alice sigue en sus trece y como ha descubierto el secreto de Savannah la chantajea para que le ceda su puesto. Marty acude a ver a Savannah y pedirle disculpas. Al final hacen las paces tras la guerra de almohadas (O_o) y Savannah le cuenta toda la verdad así que Marty decide que sea ella la voladora. ¡Qué facilidad para perdonar! Finlamente, el equipo consigue su pase a los regionales. Por otro lado, Alice se enfrenta a su padre confesándole lo dolida que está por el poco caso que le hace y las mentiras que le ha estado diciendo (entre ellas que ya no sale con Lewis). Un último apunte que me dejó algo desconcertada. El compañero de estudios de Marty le pide  a la madre de ésta que vaya a la cárcel a visitar al preso que está visitando su hija para que le lleve una guitarra. La madre al final acepta, y se aprecia cierto feeling con el preso. ¿Relación amorosa en ciernes? El capítulo estuvo bien. No es una gran serie, pero al menos los últimos capítulos me han entretenido lo suficiente. Veremos como continúa ahora que Marty y Savannah son amigas y dan sigue desaparecido.

90210
(OjO: spoilers hata el 3x12)

El inicio de esta tercera temporada ya fue muy prometedor y se fue consolidando a lo largo de la primera parte. El regreso de las vacaciones sigue en la misma línea ascendente así que me declaro muy fan de los guionistas.

- ANNIE/ LIAM: Estuvieron muchos capítulos jugando para el último antes del descanso acostarse. Pero no podía reinar la felicidad tan pronto en la dramaqueen por excelencia de 90210. A pesar de tener muchas dudas y azotada por la mini yo de Jennie Garth (es asomobroso su parecido), su prima recién llegada de Kansas, Annie finalmente se declara a Liam. Pero éste, a pesar de que está enamorado de ella hasta las trancas, no puede herir a su hermano ya que todo el odio que le tenía ha desaparecido enseguida tras descubrir que su hermano mayor le protegió de las peleas de su padrastro. Pero este triángulo rápidamente se va a convertir en "cuarteto" ya que la prima de Annie se ha colado por Liam (¿quién no?). Mucho miedo me da la prima, aunque el triángulo sí me gusta.

- NAOMI: El cliffhanger que nos dejaron en el pasado episodio fue la vuelta del profe psicopata y éste comienza con él secuestrando a Naomi para hacerla sufrir un poco y ya de paso grabar un vídeo en el que la chica confesase que todo se lo había inventado. Al final consigue que Silver acuda también al piso y secuestrarla a ella. Al día siguiente, en un despiste las chicas se escapan y son ellas las que atan al profe. Naomi, cegada por el odio, está apunto de degollarle, pero al final Silver consigue convencerla y llamar a la policía. La verdad es que me esperaba mucho más de esta trama. No sé. Que la estuviera acosando un par de capítulos. Supongo que ahora tendrá una nueva etapa, para luego al final enfrentarse al juicio, ¿no?

- IVY/ DIXON:  Dixon sigue dolido con Ivy por lo ocurrido con Oscar así que la tensión se palma cada vez que están juntos. Sin embargo, ello no es óbice para que Dixon salve la vida de Ivy cuando tiene un accidente practicando surf. Ella querrá agradecerselo, pero él no está muy por la labor. De todas formas, Ivy ha cogido miedo al agua hasta tal punto de fingir una lesión para no ir a un campeonato. ¿Será Dixon quien se de cuenta de esto? ¿La ayudará? Mmm, me parece bastante interesante este giro.

 - TEDDY: En el último capítulo, Teddy acabó besándose con Mario, pero pidiéndole un poco de paciencia para llevar esta nueva situación. Finalmente, Dixon le confiesa que los vio, a lo que Teddy le pide que guarde el secreto. Cuando escuché los rumores de que era Teddy el que iba a salir del armario, me sorprendió mucho, pero por lo que he leído, seguiremos teniendo al mismo Teddy pero en la otra acera. Veremos como lo desarrollan. Aunque por mí que se marche a jugar un campeonato de tenis. No lo soporto.

- ADE/ NAVID/ SILVER: La vida de Ade cada vez se desmorona más. Finalmente se descubre que robó las canciones de Javier así que sale en televisión para contar su version de los hechos. Sin embargo, aparece el tío de Javier y ex manager suyo para romper todas sus mentiras. Por tanto, no se auguran buenos tiempos para la cantante ni en el plano profesional ni en el amoroso ya que Navid quiere romper con ella para salir con Silver ya que han confesado sus sentimientos y que, incluso, se han dado una beso. Sin embargo, no creo que Navid acabe rompiendo tan rápidamente y supongo que saldrá en secreto con Silver. Parece mentira que la personajes que más me gustaban al principio de la serie ahora me aburran tanto. Pero, también reconozco que es quizás la trama que mejor les encaje a los tres ahora mismo.




martes, 25 de enero de 2011

Ley sin ley


Una guerra sin cuartel en el que parece que sólo puede prevalecer uno se ha abierto en España con la llamada Ley Sinde. Son muchos los argumentos que se han oído en el último año y seamos sinceros, siempre intentando llevar a los ciudadanos a su territorio, obviando aquella parte del debate que no les viene bien a un bando. Ayer, los dos partidos mayoritarios, PSOE y PP, junto con CIU llegaron a un pacto para salvar la fase del Senado y por tanto continuar con los trámites con la ley, eso sí enmendada.

En primer lugar y por mi condición jurídica, tengo que plantearme la idoneidad de la norma. El Real Decreto Legislativo 1/1996 por el que se aprueba el Texto Refundido de la Ley de Propiedad Intelectual ya contempla dentro de su articulado la posibilidad de que la autoridad judicial puede acordar “la suspensión de la actividad de reproducción, distribución y comunicación pública”, entre otras medidas cautelares. Por tanto, ¿Qué necesidad hay de que sea ahora un órgano, el administrativo el que pueda imponer dicha decisión? La duplicidad de normas así como de procedimientos sólo conlleva a una burocracia mayor que imposibilita conseguir los fines de la misma. En relación con esto mismo, los conflictos entre libertad de expresión y propiedad intelectual no pueden dirimirse ante un órgano administrativo y menos hacer intervenir a una jurisdicción pensada en solucionar los conflictos entre la Administración y los ciudadanos, tal y como se deduce del artículo 1 de la Ley de la Jurisdicción Contencioso Administrativa de 1998. He aquí uno de los graves problemas que plantea la modificación operada en la Disposición Final segunda del proyecto de Ley de Economía Sostenible, la mal llamada Ley Sinde porque no es una ley sino una Disposición Final (lo cual podría llevar a otro debate jurídico de la manía que tienen las Cortes Generales de legislar a través de disposiciones en leyes cuyo espíritu es totalmente distinto aprovechando por tanto la coyuntura). Los únicos sujetos que pueden restituir la legalidad son los jueces y a los tribunales de forma exclusiva, como dice el art. 117.3 de la Constitución Española. El ejercicio de decidir si se ha producido una vulneración de un derecho es función exclusiva de jueces y tribunales.  En ningún caso, la lucha contra la piratería puede provocar una rutptura del ordenamiento jurídico. Y esto, amigos, es grave no, lo siguiente.

La Ley Sinde no sólo permite el cierre de páginas web de descargas, sino la posibilidad de cerrar cualquier web. Desde este blog si las productoras les molesta que utilice sus imágenes por capricho o porque no quieran que hable mal de sus series (aunque luego nos piden opinión “gratuita”, no si en el fondo les hacemos una gran publicidad) hasta las páginas de conocidas cadenas de televisión que dudo mucho que respeten a raja tabla los derechos de propiedad intelectual de las series que emiten. Por ello, la trascendencia de la modificación va mucho más de que yo no pueda descargar una serie. Es muy peligroso lo extensiva que es, y no vale la prevision de “Aramis Sinde” de que sólo va dirigida a dos centenares de webs. Tal y como está recogido cualquiera que no quiera que su obra sea pública o que le moleste lo que se dice sobre ella puede denunciar una página si has puesto algo de él que esté protegido por el derecho de propiedad intelectual, estás perdido y da igual si te lucras con ello o lo haces por amor al arte. No se estará protegiendo "la remuneración del artista", sino que su regulación ha abierto una gran puerta a la censura.

Ahora bien, todo parece centrarse en una lucha protagonizada por artistas y “descargadores”. La solución dada, según muchos artistas, no es la correcta, pero es necesaria. Bien, pues como me decían a mí de pequeña: no puedes matar grillos a cañonazos. Que hay que hacer algo eso está claro. Pero cada problema tiene que tener una solución proporcional, no arbitraria y, sobre todo, acorde con las leyes. Hay que enfrentarse al problema con un debate serio y profundo. Adaptarnos todos: tanto consumidores como artistas no sólo es necesario, sino exigible. Muchos artistas argumentan que "la consigna del gratis total (...) condena a la creación artística a una supervivencia mendicante". Nadie dice que no se les deba pagar sus creaciones, pero no pueden evitar cómo se accede en la actualidad a los bienes culturales. Hay que redefinir tanto el acceso como el pago y para ello no podemos acudir a los extremos, ni unos ni otros. Los usuarios somos la víctima de una guerra entre industrias de todo tipo y partidos políticos para ver cuál es más fuerte o el más cabezón. Es necesaria una reflexión profunda sobre la libertad de expresión y propiedad intelectual, sobre el acceso a los bienes culturales, sobre la remuneración de las obras… Todo sin contaminación, sin malos humos y dentro del marco jurídico que tenemos.

De momento, la Ley Sinde superará con toda probabilidad su fase del Senado para luego ser estudiada por la comisión pertinente y ser objeto de aprobación final por el Congreso. Esta modificación no sólo no solucionará  el hecho de las descargas, al contrario lo ha agravado ya que ha abierto una importante brecha entre los bandos. Pero, por otro lado, hay una consecuencia muy preocupante: la quiebra de los principios jurídicos fundamentales de un Estado Social y Democrático de Derecho como es España (art. 1.1 de la Constitución Española) y aún más, parece no importarles, especialmente a  los políticos, aquellos que se les llena la boca hablando de la Carta Magna. Por uno y por otro motivo, expreso mi rechazo a la Ley Sinde.

lunes, 24 de enero de 2011

Y la luz se apagó...

  
(OjO Spoilers de la segunda temporada de Life Unexpected.
Seguramente si la has dejado de ver tendrás curiosidad,
pero hay que ser legales y avisarlo ^^)

Hay finales de series que son agridulces y más si acaban antes de lo previsto. Éste es el caso de Life Unexpected. Aunque entiendo que la cadena decidiese cancelarla y las críticas de muchos, yo no puedo evitar tener cierta desolación. Cierto es que la serie empezó muy bien, con muchas expectativas para luego caer en esquemas repetitivos y aburridos. Así la primera temporada acabó desquiciando a muchos y medio contentando a otros. Pocos fuimos los que decidimos continuar con ella y aunque el primer capítulo fue aburrido y presagiaba lo peor, ocurrió todo lo contrario. El gran acierto de la temporada fue alejarse del triángulo amoroso, introducir algún personaje y/o trama interesante, aunque seguía Lux con sus caprichos y tonterías -y para llevar la corriente, a mí me encanta. Pero cuanto más entretenida se ponía, más baja era la audiencia hasta provocar su cancelación. 

Aunque ha habido capítulos más divertidos que otros, los tres últimos capítulos (el último antes del descanso navideño y los dos últimos) fueron intensos, conmovedores, dulces... No sé si porque sabía que la serie iba a acabar o porque efectivamente así lo fueron, pero yo los disfruté mucho. Por fin descubrimos que era eso tan grave que le había ocurrido a Lux. En la primera temporada, algo se dejó caer, pero no lo supimos hasta la segunda. En un momento dado, Lux, Tasha y Sam, el hijo de Emma, acuden a la casa en la que estuvo acogida  Lux. Ahí se enfrentan al padre adoptivo y Tasha le golpea con una pala. Entonces se enfrentan a un juicio. Aunque su amiga le pide que cuente la verdad, tiene dudas hasta que Eric le dice que es bueno decir la verdad. Así, en el juicio confiesa que el padre adoptivo la forzó y que por eso huyó. Además uno de los golpes que le propició no sólo la hirió emocionalmente, sino que le causó una herida en la cabeza que le hace tener problemas de concentración y demás. Ello explica muchas cosas de esa caprichosa e inconformista adolescente. Al final de ese capítulo, Lux oye como Emma, la novia de Baze, tuvo una relación con su abuelo. Y con estas revelaciones nos enfrentamos a los dos capítulos finales. El primero y gran parte del segundo se centran en resolver las cuestiones inmediatas para los diez minutos finales del capítulo 13 y con la técnica de "x años después" contarnos cómo están.


La esperada noticia es que Cate y Baze acaban juntos, lo cual era de lógico. Durante toda la temporada, ya no habían jugado al gato y al ratón, puesto que cada uno se había centrado en sus relaciones. Por un lado, Cate había tenido problemas con Ryan, pero la noticia de su embarazo los había vuelto a juntar. No obstante, el aborto inesperado y la imposibilidad de Cate de poder tener más hijos hace que rompan ya que no hay nada que les una. Además, Cate se entera de que Julia, la antigua novia de Ryan, está embarazada y termina contándoselo. Por otro lado, Baze se había juntado con Emma, su jefa. Él crece mucho con esta relación hasta tal punto de plantearse el trabajo de una forma seria y comprar una casa para los dos. Pero la noticia de que Emma había mantenido una relación con su padre durante cuatro años es superior a él así que definitivamente rompen. No se sabe cómo, pero Cate y Baze acaban juntos y Julia, Ryan y el bebe rubito.

En cuanto a Lux, vemos como su relación con Eric se rompe definitivamente tras descubrir todos su relación secreta. Lux sigue mintiendo a sus padres y acusándoles de muchas cosas en escenas con mucha carga emocional. Baze y Cate llegan a un acuerdo: si no vuelve a mantener contacto con Lux, no lo denunciaran. En realidad, Eric nunca se aprovechó de una niña, sino que la ayudo a crecer y encontrar su rumbo (muy bonito el regalo de la brújula). Al final, Lux acaba con Jones y no con Tasha. Aunque al principio no me gustase eso, pensándolo luego fríamente es lo mejor para Lux porque eso significa que Lux está mejor emocionalmente y no tiene que buscar relaciones con hombres problemáticos. Así lo demuestra en el discurso que dice Lux en la graduación haciendo por cierto, algunas metáforas sobre la luz (su nombre y en un principio el título de la serie).

Los finales felices también se produjeron para el resto de personajes. Tasha también se gradúa por lo que podemos intuir que sus problemas con la justicia se resolvieron bien. Pero la noticia que más me alegró fue la de Math. Alice, la antigua jefa de de Cate y Baze, había desaparecido en esta segunda temporada tras despedirla junto a Cate de la radio, vuelve para el final. A primera vista parece que está con Baze ya que está sentada junto a él en la graduación. Sin embargo, la mayor sorpresa es que está con Math, el amigo de Baze y profesor de Lux. Me lleve una alegría enorme. Además también aparece Jaime, el amigo de Baze, aunque no sé muy bien el motivo.

En conclusión, me pareció un buen final, no el mejor, pero sí al menos bastante bueno dadas las circunstancias. Lo único que me da pena es no saber que ocurrió en esos dos años, como Lux se enfrentó a su separación con Eric, como Cate y Baze volvieron a estar juntos, como empezó la relación de Alice y Math… Eso quedará para la imaginación. 

En el fondo, los echaré de menos...



sábado, 15 de enero de 2011

Cirujanos en la jungla

Ya dije en la última entrada de Anatomía de Grey, la relativa a la vuelta de las vacaciones navideñas, que no sé si adoraba a Shonda Rimes o la odiaba. A veces odio lo que hace a los personajes y otras veces aplaudo porque las locuras de este mujer se cuentan por millares y la última ha sido su última creación: Off the map. No abandona el campo médico que tantas alegrías le ha dado, pero le da un nuevo giro y lo lleva a la jungla con todas las consecuencias que ello traerá. 


El piloto nos muestra como tres médicos jóvenes llegan una selva de América del Sur huyendo de demonios e intentando dar un giro a sus vidas. Los tres médicos son Lily (Caroline Dhavemas), Fuller (Zach Gildorf) y Mina Minard. La clínica a la que llegan está dirigida por el D. McDreamy-ish Keeton Ben (Martin Henderson) y en el que trabajan Dr. Otis Cole (Jason George), Alvarez Zita (Valerie Cruz) y Ryan Clark (Rachelle Lefevre). Ellos conforman el equipo médico en el que surgirán conflictos laborales y relaciones amorosas. 

No nos engañemos. Los personajes se basan en las fórmulas conocidas e, incluso, podemos apreciar semejanzas con los médicos del Seattle Grace. Sin embargo, los actores parecen ser lo suficientemente buenos (además de ser muy atractivos) como para hacer que te interese la serie. Al menos en el piloto, que es lo que podemos juzgar, así parece. El verdadero desafío será para los guionistas porque no los tendrán que hacer esclavos de la localización, es decir, tendrán que ser imaginativos a la hora de buscar nuevas tramas que no sólo sean los conflictos de lenguaje y enfermedades raras.

Por otro lado, el piloto tiene algunos reparos. No es muy emocionante al menos para atraer a un público ajeno a este tipo de series. Aunque si es lo suficiente para mantener el interés de su público objetivo, en el que me encuentro por eso me pareció entretenido. Hay varios momentos que nos explican el pasado de los personajes y otro par que buscan la lágrimilla fácil. Sin embargo, algunas escenas quedan algo incompletas, es decir, cambian de forma muy brusca de un escena a otra cortando toda la tensión y por tanto, bajando el ritmo de las mismas, que fue lo que más me chocó de todo el capítulo.

Sin duda es una serie dirigida especialmente a los fans del género, ya que el cambio a la isla podría convertirse en un giro interesante donde los lugares paradísiacos, las lesiones que se pueden dar en este tipo de ambiente, la falta de una práxis pueden convertirse en tramas interesantes. Quien no le guste este tipo de series huirá de ésta como de las anteriores ya que no tiene nada lo suficientemente bueno como para que se puedan enganchar. Yo, en cambio, gran fan del género y de Shonda, me ha dado lo suficiente como para seguir viéndola. La cuestión será si me dará ingredientes nuevos para que no me canse. 





miércoles, 12 de enero de 2011

La publicidad se basa en una cosa: la felicidad

La publicidad es un arma de doble filo. A veces ocurre que tanta publicidad puede provocar que aborrezcas una serie tanto si no has llegado a darle una oportunidad como si se la has dado. Otras puede ocurrir que no te afecte de ninguna manera y por eso no la veas. Ésta era mi postura hacia Mad Men hasta hace unas semanas. Por muchos anuncios que viese, por muchos premios que recibiese, por muchas recomendaciones que oyese, por muchos post que leyese, no me llamaba la atención (aunque no sé muy bien el porqué ya que mi desconocimiento hacia la serie era total). Sin embargo, en el Black Friday de Amazon hubo una oferta inmejorable de las tres primeras temporadas en bluray y “presionada” por @serieina_Felipe decidí adquirirlas. Una vez ya en mi poder, la cuestión era cuándo verlas. Así, llegaron las Navidades y me dispuse a verla. Aunque en un principio me había propuesto verla con tranquilidad, me fue imposible. Las tres primeras temporadas las ví en los tres fines de vacaciones. ¿Y por qué de tanto enganche? La verdad es que yo soy la primera en sorprenderme, pero realmente son ciertas todas las alabanzas que se pueden hacer.


Antes de explicar las razones de por qué tanto entusiasmo, veamos muy brevemente de que va ya que no es mi pretensión hablar aquí de spoilers y creo que hasta lo más obvio, puede restar el disfrute de la serie.  Como curiosidad, toma el nombre por el que eran conocidos los publicistas de la Avenida Madison en Nueva York. Ambientada en los 60, gira alrededor del conflictivo y competitivo mundo de la publicidad, y sigue las historias de los hombres y mujeres que trabajan en la agencia de publicidad Sterling Cooper, quienes hacen del vender un arte y cuyas vidas son movidas por sus egos.

Ya desde el inicio me cautivó. Y no sólo me refiero al piloto, que ha sido calificado como toda una lección de seducción al telespectador, sino por el opening que es uno de los mejores que he visto. Yo suelo pasar casi todos, pero con éste me era imposible porque hay algo mágico en él que hipnotiza. En muy pocos segundos y al son de A Beautiful Mine, de RJD2, consigue realizar una inmejorable metáfora de la serie. El mad man, en aquella época, era alguien prestigioso y triunfador; sin embargo, no estaba exento de las caídas que la vida te proporciona. Esto mismo es la esencia de Don Draper, el protagonista de la serie, un hombre lleno de carisma y magnetismo. Ello se logra con la exquisita  interpretación de John Hamm, que logra un personaje lleno de matices haciendo creíble ese triunfador que no lo es tanto en su vida personal.

Aunque parezca que él lleva todo el peso de la serie, es imposible no prestar atención al resto de personajes. Tanto habituales como esporádicos no se quedan atrás, incluso los niños hacen un trabajo maravilloso. Mención especial se merecen Peggy (Elisabeth Moss), Sterling (John Slattery) y Joan (Christina Hendriks, quizás el personaje más desaprovechado de la serie). Todos ellos configuran un grupo heterogéneo en el que no se busca caer bien. Ellos son fiel reflejo de esa sociedad norteamericana de los años 60 en que los hombres llevaban la voz cantante y las mujeres se dividían entre luchar en un mundo de hombres o mantener su posición de amas de casa. No se esconden de ser sexistas, homófonos y racistas. Abordan problemas y tabúes de la época tales como la homosexualidad reprimida, embarazos no deseados, adopción o divorcio, todo desde esa perspectiva. Pero aunque puede parecer lejana, en realidad no lo es tanto.

Tiene una excelente ambientación y una perfecta caracterización de la época (mi madre llegó a creer que era una serie de los 60 por esto). Lo cual se consigue prestando atención a todos los campos. Las historias de Mad Men se construyen gracias a los pequeños detalles. Todo, desde los objetos más cotidianos hasta los objetos de la publicidad, forma parte de ese juego visual que enriquece la manera de contar las historias. Nada es dejado al azar. Un simple lápiz de labios significa más de lo que a priori pueda parecer. Tampoco el vestuario es una cosa baladí ya que la elegancia que estilan ha llegado incluso a crear tendencia en la actualidad. Junto a ello, destaca ese diálogo inteligente, agudo y crítico, pero sobre todo conciso, en el que no es necesario grandes parlamentos para que te integres en la historia y en las emociones de los personajes. Además los guionistas han sido muy cuidadosos para integrar las referencias adecuadas a los acontecimientos del mundo real y los productos que se hicieron famosos en ese período. Dicho de otro modo, el propio aspecto visual de la serie es un protagonista más que se refleja con una factura lujosa y fascinante (y no lo digo sólo porque la haya visto en bluray donde la calidad es superior, sino porque es así).

En conclusión es una serie clásica y elegante, cruel e irónica que tras haber visto las tres primeras temporadas entiendo que haya ganado tantos premios. Si podéis acercaros a ella, hacerlo, de verdad que no os arrepentiréis y si necesitáis un empujocito y más si os da pereza, os recomiendo el Proyecto de Mad Men. Tanto Mina Harker como martinyfelix y Pieman815 -OjO, los links son la review del piloto- hacen una ficha de cada uno de los capítulos que ven. Yo ahora he decidido darme un respiro a la que dicen que es la mejor temporada junto con la primera ya que aún no ha salido el bluray de la 4 temporada, pero ya tengo apuntado en la agenda el 29 de marzo para pasarme por Amazon (y sí me dará igual el precio^^). ¡Qué ganas de seguir disfrutando de Don y compañía!

lunes, 10 de enero de 2011

Un hospital armado de sentimientos

(OjO: Spoilers del 7x11 de Anatomía de Grey)
Si hay una serie que se repite en la categoría de “serie que debería acabar ya” en los memes suele ser Anatomía de Grey. Yo soy la primera que lo piensa. Sin embargo, mis dudas empiezan a aflorar y más si vemos capítulos tan buenos como el de la vuelta de las vacaciones.  Por todos es conocido que la sexta temporada fue un bluff en consideraciones grandes (a excepción del final que fue lo que salvó los muebles), pero esta séptima temporada la estoy disfrutando como hace un año jamás pensé en hacerlo. Que conste que no me parece la mejor de Grey’s Anatomy, pero sí me parece muy buena. Quizás también hay que reconocer que ya no sé si adorar u odiar a Shonda que es capaz de darnos lo mejor y lo peor de nuestros médicos favoritos. ¿Porque a quién se le ocurriría volver a traer un tiroteo a la serie siendo que el anterior está tan reciente? Pues sí, a Shonda.

Y es que la vuelta de Grey y compañía tiene como protagonista un tiroteo, algo tan habitual en EEUU y en la serie al paso que vamos. Aunque ellos no son las víctimas directas, es indudable que este hecho les iba a pasar factura. El inicio del capítulo no podía presagiar tan abominable acontecimiento. Todo era feliz para Mexie (Mark y Lexie) y Crowen (Cristina y Owen) que disfrutan del amor a diferencia de Merder (Meredith y Dereck) Merder que siguen frustrados por no estar embarazados y Callari (Callie y Arizona) que siguen con su ruptura.


Cada uno se va a sus quehaceres: al hospital o a pasear en el caso de Cristina que a pesar de llevar muchos años en Seattle, no sabe dónde están los monumentos a visitar. Y es ahí cuando tres ambulancias pasan a su lado lo cual algo malo hace presagiar. Efectivamente. Se había producido un tiroteo en una escuela y Cristina se acerca y algo en sus entrañas se mueve. Para sorpresa de todos cuando llega la ambulancia al hospital quien le ha practicado esa cirugía es nuestra querida Yang, que diciendo que está bien vuelve a entrar en quirófano. Luego descubrirá que el paciente es el tiroteador y decidirá fácilmente quedarse con Teddy a operarlo ante la espantada del resto de médicos y de enfermeras. ¡Qué bien que volvió y además de esta forma! Pero, ¿será algo definitivo? Ojalá!!!


A todos les afecta este hecho ya que recuerdan lo acontecido hace apenas seis meses; sin embargo se reponen y se centran en el trabajo consiguiendo que no haya ni una sola baja (¡un 100% de éxito!). Pero ello no significa que no provoque consecuencias. La que más lo sufre es Meredith que sale cada dos por tres a la sala de espera a informar a la mujer del paciente de Derek porque ante las increpencias de su marido por post-it reconoce que ella era “la esposa en la sala de espera” que llegó a entrar en quirófano y ofrecer su vida a cambio de la de Derek y que aún le duele. Ello hace constatar que la entereza de Meredith durante los diez primeros capítulos no era tan fuerte como parecía suponer. Además Meredith tiene celos de que el cirujano consiga lo que ella no ha podido: ayudar a su mejor amiga a volver al su profesión. Aunque al final, parece que la amistad entre las dos doctoras sigue adelante ya que se van a tomar unas copas juntas.


También el tiroteo repercute en la relación de Arizona y Callie. Como ya sabíamos Callie vuelve de África para recuperar a su pareja, pero mi personaje favorito no se lo va a poner tan fácil. En un principio, Arizona cree que va todo bien, porque Callie le ha ayudado en su enfrentamiento con el Dr. Stark (Peter MacNicol, es decir, ¡Bizcochito!). Pero nada más lejos de la verdad ya que Callie no la quiere cerca. Sin embargo, Richard acepta contratarla tras reconocerle que no lo hizo en un primer momento por orgullo. Esta trama traerá muchos quebraderos de cabeza y más si los rumores son ciertos OjO Spoiler *Callie está embarazada*

La última protagonista es Teddy, cuya trama me gusta mucho. Su intento de que el hospital diese probonos a las personas que no pueden costear sus tratamientos fracasó, pero al ver a Henry –Scoot Foley- se le ocurre una idea. Si se casan, él podrá aprovecharse de su seguro médico. Estoy convencida de que si hubiese sido otro, no lo habría hecho, pero las chispas saltan con este chico. Y finalmente se casan en una boda que ni Speedy González con Owen de testigo. Al final del capítulo, ella no tiene mucho ánimo para celebrarlo, pero al final Henry consigue sacarle una sonrisa. Aquí hay tomate, como es obvio.

En definitiva, una muy vuelta de los médicos de Seattle Grace, con muchas escenas para comentar como las que hemos mencionado o la que están viendo todos la operación y que al principio lloran y luego se empiezan a reír a carcajadas. Seguramente no es el mejor episodio, ni como hemos dicho la mejor temporada, pero sí, estoy disfrutando mucho y eso se nota en que empiezo a tener dudas de si quiero que acabe la serie ya que quiero saber que sorpresas tiene preparadas Shonda a nuestros médicos.

miércoles, 5 de enero de 2011

Al final marcó el touchdown


Mucho había leído sobre que Friday Night Lights era una serie que merecía ser vista; sin embargo, no terminaba de llamarme lo suficiente la atención como para ponerme a verla. Dos hechos cambiaron esto: uno, aprovechar la contraseason de verano de 2010 y dos, que un amigo comenzó en esa época a jugar a fútbol americano. Así comencé su visionado en verano y en Navidades terminé su cuarta temporada, no sin antes haber sufrido y no precisamente por los personajes.
 
El piloto me pareció sumamente aburrido, confuso y abstracto, como si no supiesen realmente que hacer con él. Aún así estaba convencida a darle una oportunidad y seguir con ella. No puedo decir el momento exacto en el que me mi percepción empezó a cambiar, aunque sí puedo decir quienes son los personajes que me atraparon: los Taylor y Matt Saracen. Por ellos y por la insistencia de la blogsfera en general decidí continuar. Según los fans, la primera temporada es espectacular; si bien hasta más de la mitad de la misma seguía pensando que era muy aburrida. En cambio, los cambios experimentados en la segunda que algunos tacharon de irreales o poco acordes con los personajes me gustaron. Mientras que la tercera y especialmente, la cuarta –la mejor para mi gusto- fueron in crescendo ya que Matt y el matrimonio Taylor tuvieron tramas muy interesantes y que me engancharon, además de que en la cuarta introdujeron un personaje que también me gustó.

Mucho tiene que ver que no me haya atrapado desde el inicio su realización ya que por todos es conocido mi animadversión a la cámara en mano. Para mi gusto y sobre todo en la primera, abusan de ese tipo de rodaje tan inquieto con una fotografía muy cerrada. Mientras que las escenas de los partidos de fútbol me parecen asombrosas, muy bien rodadas y que consiguen meterte en el partido, no así en aquellas en las que las conversaciones de los personajes exigen otro tipo de filmación en la que pueda ver a los personajes sin marearme. Esto es algo totalmente subjetivo, que quede claro. Si bien, también tengo que reconocer que luego me fui acostumbrando, aunque ello contribuyo que había menos temblor en la cámara.

Por otro lado, uno de los argumentos más utilizados a la hora de alabar la serie es que no es otra serie teen, como si hubiese series teen buenas y series teen malas.  Ello era uno de las argumentos que más me echaban para atrás ya que da la impresión de que lo hacen con superioridad, como mirando por encima del hombro a las otras series de adolescentes, algo que odio ya que soy gran defensora de este género en sus múltiples versiones. Que no sean los mismos que en 90210 o Gossip Girl, no la eleva a una categoría superior. Es como comparar Detroit 187 con CSI. Ambas son policiacas, pero muy diferentes entre sí y ni una por eso es mejor que la otra. En Friday Night Lights, los personajes principales son los adolescentes, con permiso del entrenador y su mujer, así que sí, es una serie teen. Líos amorosos, estudios y el deporte centran buena parte de las tramas de las cuatro temporadas.

No obstante, sí estoy de acuerdo con uno de los argumentos: su realismo. La serie realiza un perfecto retrato de la América profunda, donde la moral es casi tan importante como el fútbol. Todos los problemas o cuestiones se ven desde esa perspectiva y ello es lo que más me ha gustado de toda la serie. Por otro lado, tanto guionistas como directores saben jugar muy bien la baza de los sentimientos, aunque en algún momento me parece forzada convirtiendo todo en una desmesurada melancolía. En esto, también hay que reconocer la valía de los actores, cuya interpretación resulta muy efectiva. En este punto, resulta llamativo que Connie Britton y Kyle Chandler no hayan ganado más premios. Su matrimonio resulta muy creíble, no sólo en los momentos en que hablan o discuten, sino en esos silencios  en las que las miradas dicen mucho más. Son ellos los que realmente sustentan este drama. La otra pata está encarnada por Matt Saracen, interpretado por Zach Gilford, del que recomiendo la lectura del post de Vaya Tele ya que suscribo cada una de sus palabras.

Que quede claro que a pesar de que me costó mucho entrar en la dinámica de la serie y de que hasta bien entrada la tercera no llegué a disfrutar plenamente, no me arrepiento de haberla visto. Sinceramente, para mí no es la mejor serie, pero sí es buena, es decir, que no me entusiasme no quiere decir que no me haya entretenido. Hay ciertas cosas que no me han gustado como la cámara en mano o  algunos elementos tópicos, pero al final el balance no está mal. La serie consiguió marcar el touchdown y ganarme a mí, aunque en la segunda parte y por sólo dos puntos.

Unas mentiras después...

(OjO: spoilers del 1x11 de Pretty Little Liars)
 
En verano - que lejos queda ya- se estrenó Pretty Little Liars o las zorritas como las llamamos cariñosamente  aquí que como ya vaticiné en su veredicto tenía todos los elementos para engancharme y efectivamente así fue. Tras una larga espera ya han vuelto y con fuerzas, sí, porque fue un capítulo muy bueno en el que, como era obvio, no resolvieron nada y nos dejaron con varios WTF y momentos de "esto es muy normal, claro" (#modoironíaon). 

Creo que a todos nos vino bien el previosuly ya que tras 6 meses eran muchas las cosas que podíamos haber olvidado, a excepción claro del cliffhanger: el atropello de Hannah junto con el mensaje de que ella sabía demasiado. El capítulo comienza justo momentos después de eso. La madre de Hannah que había robado el banco es parada por la policía. Aunque ella temiese que era a causa del hurto, realmente era para informarle que su hija había sufrido un accidente.

Momentos después nos encontramos ya en el hospital en el que vemos a Hannah sólo con una pierna rota y sin ninguna herida o rasguño en la cabeza. Así es como se tiene un accidente y no se estropea la belleza. Las chicas son las primeras en ir a visitarla, aunque la madre de Hannah las manda a casa. Al día siguiente vuelven a acudir al hospital para hablar con ella. Hannah les cuenta nque cree que A es Noel porque le vio escribir I" see you" en el coche en el que estaban Aria y Ezra. Las chicas tienen claro que Toby no puede ser porque sigue en la cárcel. A todo esto que ahí está la ciega para meter cizaña y decirle a Emily que no dejaría que su hermanastro tuviese contacto con ella. Entonces las pesquisas recaen en Ian al mencionar Spencer que vieron un árbol en el que se había tallado "Allison e Ian" (árbol que luego es cortado, claro...). Sin embargo, momentos después descubren que Ian ha estado toda la noche con la hermana de Spencer e, incluso, al final del capítulo Melissa e Ian se fugan y se casan (¿será para que no pueda testificar la hermana de Melissa?). Sea quien sea A, lo que está claro es que tiene un pronto muy fuerte...
Más allá de la cuestión de ¿quién es A?, el capítulo dejo también tramas sentimentales para cada una de las zorritas, a excepción de Spencer. En primer lugar, Hannah recibe la visita de Mona y hacen las paces como las niñas pequeñas. Venga, va, olvidamos el pasado y nos ponemos a maquillar, porque aunque estés en el hospital, tienes que seguir siendo glamourosa, jo tía. También es visitada por Lucas dos veces, en una le da un beso en la frente mientras ella duerme y en otra, ya despierta la enferma, hablan. Hannah le dice que sólo son amigos porque su novio le ha traído orquídeas (¿no es la flor de los muertos?) así que el fotógrafo se va molesto. La última visita es la de Allison. En un momento de alucinación, Alli le da a Hannah mensajes crípticos sobre lo que le ocurrió que es más complicado que el álgebra (O_o)
#yoconfieso que me dio mucho repeluco
Aria sigue en su relación con Ezra, que ya es pública, al menos para las amigas de Aria y para Noel. Las primeras se enfadan bastante, en especial Spencer (genial su momento cuando Aria le está contando cómo se conocieron - "Yeah, read any good books lately?" -), pero aún así lo aceptan. Quien no lo acepta tan bien es Noel que siente algo por Aria e incluso le llega a decir que la acompaña al director para denunciar al profesor. ¡Ay, incrédulo! ¡Que la niña está enamorada!
Si limpiases más el coche no te dejarían mensajes...

Pero el plato fuerte era para Emily. El padre de Emily la pilla hablando con Maya, momento que aprovecha para interrogarla sobre Toby ya que la ve algo cabizbaja. Finalmente su padre la empuja para decir  por qué últimamente está tan rara y ella le confiesa que es gay (repetido varias veces para que no hubiese duda). Así, Emily sale del armario. Su padre se lo toma mejor que su madre que piensa que lo importante es que esté sana y a salvo, pero hasta cierto punto ya que piensa que simplemente está experimentando. De todas formas, descubrimos que quien tiene las fotos de Emily y Maya besándose es su madre.


Un genial capítulo que finalizó con Noel acechando a Ezra y con el árbol en una chimenea (sea quien sea A debe tener muy buena sierra y muy buen camión para poder talarlo...). ¡Ay, yo quiero ver más de las zorritas!

martes, 4 de enero de 2011

Un asesino anda suelto por Wisteria Lane

(OjO Spoilers del 7x11 de Desperate Housewifes)

Las Desesperadas han sido las primeras en volver tras el parón navideño y lo hicieron con un capítulo que debía resolver los desastres del último episodio de diciembre – del cual no hice la correspondiente review por falta de tiempo, pero que me encantó. Los frentes abiertos que dejaron fueron el intento de asesinato de Paul, el estado de salud de Susan, el drama de Gaby, la confesión de Renee y el suplemento totalmente innecesario de la vuelta de Orson.

En relación con quién disparo a Paul, al comienzo del capítulo, las sospechas recaían en todos los habitantes de Wisteria Lane, en especial de Bree, Lynette y Gaby que no escondían su alegría por el suceso. Sin embargo, los guionistas tenían guardado un as y las sospechas enseguida recayeron en Mike y durante muchos minutos pensé que él había sido el artífice. Sin embargo, todas las sospechas se esfumaron cuando Mike repitió por activa y pasiva que él no había sido ¿o no? Las pesquisas de los detectives continuaban así que era necesario interrogar a la víctima y he aquí lo mejor de todo el capítulo. Cuando los policías le preguntaron a Paul sobre Beth, revelaron un detalle que Paul parecía desconocer: Beth es hija de Felicia Sin duda es una revelación que tendrá efectos muy importantes para la pareja y para la vida de todos los de su alrededor ya que, como todos sabemos, Paul quiere venganza. Las dudas sobre quién disparó a Paul siguen volando por Wisteria, pero espero y deseo que sigan jugando con nosotros durante bastante tiempo y no lo resuelvan enseguida.

La segunda cuestión que nos dejó los disturbios fue el incidente de Susan. Ya sabemos que en Wisteria pasan cosas muy raras, pero lo de Susan me parece demasiado. Ahora resulta que tiene problemas de riñón. Sí, los guionistas han apostado que pueden hacer la vida de Susan aún más desgraciada. Si su único riñón –el otro fue extirpado porque se le reventó- tenía posibilidades de poder durar de 3 a 5 años, los guionistas se encargaron de eliminar toda posibilidad ya que al final del capítulo Susan tiene una fuerte recaída – eso sí, tras burlarse y empeñarse en acompañar a su hijo MJ a la cafetería a por un helado. Realmente nunca me ha caído muy bien este personaje, pero la hacen tan sumamente desgraciada que ya me supera.


Las dos historias que parecían a priori menos importantes fueron las que más me gustaron. Por un lado, está la reacción de Lynette ante la confesión de Renee de que se había acostado hacía 20 años con Tom. Aunque Susan ya le había dicho a Renee que no le confesaría nada a su amiga, Renee conmovida por los hechos acontecidos decidió finalmente decirle la verdad a Lynette en plena reunión de trabajo. Esto me  desconcertó, aunque la culpa es mía por desear con todas mis fuerzas que Renee fuese una Wilhemina 2 (su personaje en Ugly Betty), pero ya veo los guionistas no la quieren llevar por ese terreno. Volviendo al resumen, Lynette se sube al coche y le hace prometer a Renee que jamás le contaría el secreto a Tom porque al parecer quiere hacerle su propio castigo a su marido. Y tan terrible castigo – de momento, quién sabe en futuros capítulos- es que se queme la lengua con un café hirviendo. ¿Surrealista? Mucho, pero me encanta.

 Y por otro, está la forma en como están llevando es la de Gaby, ya que no se le puede pedir que de la noche a la mañana se olvide de su hija Grace, por mucho que haga daño a “Huaniraaa”. El matrimonio Solis decide llevar a su hija a una psicologa que les pide que hagan desaparecer todo lo relacionado con Grace. Mientras que Carlos está decidido a hacer lo que sea para que Juanita no sufra, a Gaby le resulta imposible tanto que se obsesiona hasta tal punto de sustituirla por una muñeca. ¿A dónde nos conducirá todo esta historia? Curiosidad máxima.
Y por ultimo, el añadido más innecesario y la trama que menos me gustó a excepción de la escena de la cena, claro. Orson vuelve a la vida de Bree ya que sigue enamorado de ella. Ella, pensando que ha sido la ennovia de Orson quien lo ha echado de casa, acepta que se quede por unos días a pesar de todas las reticencias de Keith que enseguida se da cuenta de las verdaderas intenciones de Orson. A pesar de este intento, Bree acaba declarando su amor a Keith rodeada de estiércol. Por fin se cumplió uno de mis sueños: ver a la perfecta Bree manchada de caca. Sin embargo, no creo que fuese necesaria la visita de Orson que jamás debió volver a Wisteria.

En definitiva, fue un buen capítulo, aunque quizás no tan espectacular como cabía esperar para la vuelta de las Desesperadas, cuya séptima temporada me está gustando más de lo que pensaba, por lo que no me arrepiento ni un ápice de haber vuelto con ellas. ¡Qué grandes son!

sábado, 1 de enero de 2011

Mis propósitos para el 2011

Cada uno de enero nos encontramos con las mismas tradiciones: dormir hasta tarde, luchar contra la resaca, comer con la familia si el cuerpo lo permite y, cómo no, hacer la lista de propósitos para el año nuevo (aunque sepamos que muchos no los cumpliremos). 


Y como ya hice el año pasado, aquí están mis propósitos seriéfilos para el 2011:

1. Los que arratro del año pasado:
  • Finalizar Urgencias (última temporada)
  • Revisionar Expediente X y hacer un especial en el blog 
2. Los que se mantienen del año pasado:
  • Continuar con el blog y actualizarlo al menos con la misma periocidad que el año pasado.
  • Llevar las series a ritmo de emisión.
3. En concreto,
  • Ver miniseries, especialmente británicas y de época.
  • Ver series asiáticas. 
3. Finalizar las temporadas pendientes de las siguientes series:
  • Mentes Criminales (5 y 6 temporadas)
  • Breaking Bad (3 temporada)
  • Chuck (a partir de la 3 temporada)
  • Six Feet Under (a partir de la 3 temporada)
  • Weeds (a partir de la 3 temporada)
  • Carnivale (2 temporada)
4. De la lista negra, ver las siguientes series:
  • Firefly (1 temporada)
  • Kings (1 temporada)
  • Pushing Daisies (2 temporadas)
  • Roma (2 temporadas) 
  • In Treatment (3 temporadas) 
  • It's Always Sunny in Philadelphia (6 temporadas) 
  • Dexter (6 temporadas)
  • The Shield (7 temporadas)
  • The West Wing (7 temporadas)
  • Shameless (7 tempordas)