lunes, 22 de marzo de 2010

La historia, fuente inagotable de ideas

Cuando a los niños les preguntan de pequeños cuál es su asignatura más odiada, muchos dirán sin duda que la historia. Eso de recordar datos, fechas y nombres era para muchos una gran dificultad. Para mí, no. La historia siempre ha sido una de mis asignaturas favoritas. Me gusta saber qué ha ocurrido antes de que yo naciese, qué hechos han llevado a donde estamos. Además no se me daba mal recordar datos lo cual es toda una ventaja. Así, no es de extrañar que tenga una fijación especial por la ficción histórica, que tan de boga está últimamente ahora.

La ficción histórica es un género literario, cinematográfico y seriéfilo en la que la acción se desarrolla en un contexto histórico verídico, a partir del cual se nos presentan los hechos desde el punto de vista de los personajes de la época. Este género despierta tanto amores como odios, especialmente de los expertos históricos que sostienen que no se ajustan a a la realidad. Pero no olvidemos que estamos ante ficción porque para  ver la realidad tenemos ya el género documental. Por eso, podemos permitir e, incluso, perdonar ciertas licencias a la hora de plasmar los hechos. Los escritores y guionistas de este género intentan capturar el espíritu, las costumbres y las condiciones sociales de las personas o del tiempo. Por ello mismo, prestan especial atención a los detalles de la época para hacernos trasladar a épocas, que generalmente no conocemos por cuestiones de edad claro, aunque eso no obsta para que la imaginación esté presente y se desvíen un poco de la realidad para mostrarnos algo curioso, entretenido o divertido ya que ante todo, deben ofrecer un espectáculo que seduzca al telespectador. Dentro de este gran género, podemos diferenciar aquellas series en las que se recrean historias ficticias pero dentro de un contexto verídicto, de aquellas otra que si parten de hechos reales.

La historia siempre ha sido utilizada a la hora de formar series de televisión. Son famosas de todos los tiempos: Norte y Sur, con Patrick Swayze y Kirstie Alley; Yo, Claudio, con Derek Jacobi, Shogun, con Richard Chamberlain, Arriba y Abajo, Marco Polo... Y actualmente también seguimos en un boom bastante importante. Estas nuevas series se caracterizan por dos notas signiticativas: por un lado, que suelen contar con grandes especialistas en la materia que aconsejan sobre los escenarios, los objetos, el vestuario... y por otro, los productores no suelen escatimar en medios a la hora de recrear las historias lo cual se consigue una buena impresión. Así, últimamente han destacado Roma, que está siendo magistralmente revisionada en Seres de Televisión, como Yo Claudio; John Adams, Orgullo y prejuicio, Band of Brothers y The Tudor, entre otras muchas.

Precisamente y en relación con esta última, la cadena Showtime prepara The Borgias, que está basada en la cruel y ambiciosa familia del Renacimiento. Ocupará lo más seguro el espacio dejado por The Tudors, que finaliza este año. Este proyecto lo encabeza en la interpretación Jeremy Irons, que interpretará a Rodrigo Borgia, luego Papa Alejandro VI; en la dirección, Neil Jordan, director de Entrevista con el vampiro, y el guión lo firma Michael Hirst, guionista de The Tudors. Ahora mismo está en pre- producción y se espera que se estrene en primavera del año que viene así que nos toca esperar y sufrir los interminables cambios que seguro que habrá hasta su estreno. Yo al menos la esperaré con ganas.

Pero tampoco nos podemos olvidar que en marzo se ha estrenado una de las grandes series que esperaban muchos, incluída yo y eso que no soy gran amante del género bélico: The Pacific. Con Spielberg y Hanks, podíamos esperar algo muy bueno y así ha sido. Además, también tenemos que agradecer el esfuerzo de Canal + que la ha traído con sólo un día de diferencia de su estreno americano. Antes de cada emisión, echará también un capítulo de Hermanos de sangre para todos aquellos que no la han visto o que quieren volver a revivir estas escalofriantes escenas.

Volviendo al tema que nos ocupa, en España, también se ha utilizado el género histórico en las series. Particularmente, la cadena pública ha utilizado la historia de España del siglo XX en varias de sus series más famosas: Cuentame cómo pasó, Amar en tiempos revueltos o La Señora. Aunque otro de sus éxitos, Águila Roja, se remonta algo más en el tiempo, concretamente al siglo XVII. El motivo que esgriman los directores de la cadena es que estas series invitan a la nostalgia por una gran parte del país, de ahí que tengan una audiencia importante. Por otro lado, TVE también ha utilizado los hechos reales para otro tipo de miniseries y tvmovies con un fondo más morboso cómo es contar los asesinatos más famosos en La huella del Crimen. Pero TVE no  ha sido la única. Estamos ante un auge de este subtipo de series y las cadenas  enemigas por antonomasia han cogido el gustillo a realizar distintas miniseries o películas de televisión basadas en hechos reales como El pacto, 20- N, 48 horas, Una bala para el Rey, Sofía (todas éstas de Antena 3) o La Duquesa de Alba (Telecinco), entre otras muchas.

El género histórico, sin duda, está de moda y eso lo demuestra la interminable saga de series basadas  o ambientadas en la historia. Sea o no totalmente fiel a la realidad, es un género que me gusta especialmente si está bien cuidada la escenografía, el vestuario y todos esos detalles que me hacen ir a esa época. Ya sólo con esa presentación, al menos mi curiosidad ha saltado. Aunque, como todo, también dependerá de que tramas me estén contando para que me enganche finalmente o no porque éstas son las verdaderas protagonistas de las series.


4 comentarios:

satrian dijo...

La verdad es que he visto bastantes series históricas, la única que tengo aun sin ver, son Los Tudor de la que haré maratón cuando acabe, pero de todas de momento me quedo sin dudas con Band of Brothers.

Pilar dijo...

A mí me gustaba la historia, me gusta enterarme de ese tipo de cosas. Sin embargo, no he llegado a engancharme a muchas series históricas. Lo que más me llama de ellas es la recreación histórica, los vestuarios, etc., sobre todo si está tan bien preparado como el de Roma, donde el estilo visual y la recreación es de película (o mejor)
Con Los Tudor no pude, me aburrí demasiado a los pocos capítulos, y ya no la retomé. La que estoy viviendo mucho es Roma, que estoy a cuatro capítulos del final y no quiero que se acabe, porque cada vez es más genial!
Las series españolas sí que las he seguido algo más, principalmente cuando vivía en casa, porque a mi madre les gustan mucho. Así, vi varias temporadas de Cuéntame y las dos primeras de Amar en Tiempos Revueltos, que me gustaron bastante (especialmente la primera temporada, después ya empezó a desvariar...). Las miniseries, sin embargo, me han parecido casi todas bastante basurilla así de primeras, así que no me animé a verlas.
Espero con ganas los Borgia, porque la historia de base ya me parece muy interesante, a ver qué tal la hacen. The Pacific, sin embargo, no me llama tanto, será que el género bélico no es lo mío...
Lo que es indudable es que podemos esperar más y más series históricas, porque no implica inventar una serie de la nada, e imaginación para buenas premisas parece que escasea en las series actuales. Y, por supuesto, sobreanalizarlas para ver si coinciden con la supuesta realidad es absurdo, ficción es ficción y lo importante es que te haga disfrutar.

Pilar, de Con Series y a lo Loco

Alejandro A dijo...

también podría meterse Mad Men?, por su desarrollo en los 60 obviamente aunque no se base en ningún hecho histórico éstos sí tienen importancia en la serie

LiPooh dijo...

- Satrian: A mí, Los Tudor me encanta, aunque bien es cierto que tras la segunda baja bastante su nivel. Ya me dirás que te parece.
- Elsa: Coincido contigo. Yo también las veo, aunque sea mucho después y mi debilidad son las adaptaciones victorianas y austerianas. Ay omá qué rico Jonathan!!! Una de las razones de ver los Tudos es él, jejeje.
- Pilar: No he visto Roma, aunque está muy alto en mi lista negra. sólo hace falta encontrarle un hueco. Yo, en cambio, las españolas no las he visto. ¿Falta de interés? No lo sé. Yo tampoco soy muy del género bélico, pero The Pacific me llama. Ya te contaré.
- Alejandro A: Sí, ¿por qué no? Ya que hay una clase de series históricas que son aquellas que recrean tramas ficticias dentro de un contexto verídico así que Mad Men se metería aquí.

Saludicos a los 4.